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El extraño comportamiento de Serena Williams en Wimbledon

La número uno del mundo debió abandonar la competencia de dobles luego de mostrarse mareada y llamativamente errática.

Daniel Andrade

Jueves 3 de julio de 2014

Serena Williams es la número uno del mundo del tenis femenino y una de las jugadoras más dominantes de la historia, pero este miércoles se vio casi como una amateur en las canchas donde se está llevando a cabo Wimbledon.

La estadounidense estaba disputando la segunda ronda junto a su hermana Venus, cuando debió retirarse al momento que solamente llevaban tres juegos disputados.

¿La razón? La número uno del mundo disputó dichos games mostrándose evidentemente mareada desde el calentamiento previo al encuentro, al punto de ni siquiera poder tomar la pelota con la mano.

Luego de unos primeros juegos donde poco pudo hacer y llegando tarde cada vez que le tocaba golpear la pelota, le tocó sacar en lo que fue el momento donde más claro quedó que no estaba en su plenitud mental ni física.

Allí Serena no podía superar ni la red, le costaba lanzar la pelota al aire para servir y, cuando podía hacer que su saque superara la malla, ésta iba a cualquier parte, por lo que mejor optó por retirarse, saliendo de la cancha entre lágrimas.

La versión oficial dice que la tenista sufre un virus, la que no la dejó poder actuar normalmente, aunque la preocupación quedó instalada en el circuito WTA.

Hay que recordar que Serena ya había quedado eliminada en el cuadro de singles ante la francesa Alizé Cornet en la tercera ronda del certamen.