Sin lugar a dudas, este debe de haber sido uno de los partidos más complicados para Milovan Mirosevic.
El volante creativo enfrentó por primera vez a Universidad Católica después que dejara el club tras no llegar a un acuerdo con los dirigentes Cruzados. Unión Española le abrió las puertas y el "10" no lo dudó.
Hoy, en la segunda fecha del Torneo de Apertura, los hispanos recibieron a la UC, con Mirosevic como titular.
La hinchada de Católica no emitió canto ni grito alguno a favor o en contra del "Milo". Solo en el minuto de silencio por el fallecimiento de la hija de Boris Rieloff se escucharon un par de insultos contra los dirigentes de la UC.
Sin embargo, a los 11 minutos de partido, una facción de la barra de los Cruzados hizo detener el partido para homenajear al volante.
Se subieron al alambrado y colgaron una bandera que decía "Mi10van es Católica", momento donde le cantaron y aplaudieron a todo volumen.
#MilovanEsCatolica Merecido homenaje. pic.twitter.com/MyMgCThLeL
Miguel Ponce (@Chueco_ponce) julio 27, 2014
El partido estuvo detenido un par de minutos hasta que el propio jugador, que agradeció el hecho, pidió que se bajaran para continuar con el partido.
Una vez que el balón volvió a rodar, se escuchó el último y más significativo canto: "Milo, Milo querido, los Cruzados jamás te olvidarán".
Efectivamente, los Cruzados jamás lo olvidarán, como tampoco el hecho que los dirigentes de Católica hayan dejado partir a uno de sus máximos ídolos.