Universidad Católica suma tres derrotas en las primeras cinco fechas del Apertura y se ubica en una lejana decimosegunda posición de la tabla, resultados bastante inferiores a los esperados a principios de temporada.
De hecho, la campaña bajo las órdenes de Julio César Falcioni no solamente le impiden soñar con el título por el momento, sino que está ingresando en la historia como una de las peores del equipo de la franja.
La performance del equipo hasta ahora es la más pobre que ha tenido en los últimos diez años y su segunda peor desde el comienzo de los torneos cortos en el país, en el año 2002.
El peor arranque del la UC en un certamen de estas características se dio en el Apertura 2004, cuando el plantel del equipo dirigido en ese entonces por Óscar Garré, alcanzó a sumar solamente tres unidades en sus primeros cinco compromisos, producto de una victoria y cuatro caídas.
Allí, tras debutar con una victoria contra Audax Italiano, sumó cuatro derrotas consecutivas, siendo la última ante Santiago Wanderers en la quinta fecha por 1-0 como local, lo mismo que ocurrió, casualmente, este fin de semana.
Dicha campaña no terminó de la mejor manera, considerando que Óscar Garré fue despedido a mitad de torneo y el equipo cerró una de los peores desempeños de su historia, finalizando en el puesto 13 de la clasificación global, de un total de 18 participantes.
La actual performance cruzada, además, igualó el pobre arranque del Apertura 2003 cuando se consiguieron seis puntos en las primeras cinco fechas y quedó apenas por detrás del Clausura 2006 y del 2008, cuando en ambos se logró siete unidades en la misma cantidad de duelos iniciales.