Universidad Católica cumplió la tarea y venció por 3-1 a O'Higgins, ante 7.407 espectadores que llegaron a San Carlos de Apoquindo, para clasificar a la final de la Liguilla del Torneo de Clausura, que da el último boleto a la Copa Sudamericana.
El conjunto cruzado llegaba como favorito a este partido, tras el 2-2 de la ida en Rancagua, pero el cuadro celeste abrió el marcador con un potente disparo de Sebastián Pinto a los 11 minutos, tras asistencia de Braulio Leal luego de un rápido saque lateral.
El gol dejó 'groggy' a la UC y asustó a sus adeptos, porque el local no podía superar la ordenada zaga y, al menos, logró irse al descanso en igualdad con el oportunismo de Roberto Gutiérrez, que anotó de cabeza (34'). El cuadro de la franja fue mejor en general.
En el complemento el equipo de Mario Salas salió con todo y fue así como Fernando Cordero anotó el segundo (46') con un toque sutil ante la salida de Jorge Carranza, tras buena habilitación de Claudio Sepúlveda.
Tras ello se calmó el conjunto local y, bajo la batuta de Diego Rojas, dominó el partido hasta liquidar el duelo y la serie con gol de penal anotado por Michael Ríos (67'), tras dudoso cobro del juez Roberto Tobar, quien interpretó que hubo mano de Alejandro López ante disparo de Pulgar.
El cuadro de Pablo 'Vitamina' Sánchez adelantó las líneas, pero el 'Comandante' Salas aprendió tal vez las lecciones del doloroso 3-3 ante Iquique y dispuso un claro 4-4-2 para contener al rival e incluso salir de contragolpe en un disparo de Gutiérrez que sacaron de la línea (75').
En definitiva, triunfo de la UC por 5-3 en el global para clasificar a la final de la Liguilla del Torneo de Clausura, que dará un boleto a la Copa Sudamericana. Un bálsamo además para el cuadro precordillerano, que llevaba tres partidos sin ganar, desde la goleada 3-0 a Colo Colo.
El rival será Unión La Calera o San Marcos de Arica, que jugarán el jueves en Quillota (1-1 en la ida).
Foto: Agencia Uno