Theresa May recibió el encargo de la reina Isabel II en el Palacio de Buckingham. May, la segunda mujer al frente del Gobierno en la historia británica, entró al palacio poco después de que David Cameron presentase a la soberana su dimisión como primer ministro.
En sus primeras palabras públicas al frente del gobierno británico, May afirmó que este "no se guiará por los intereses de los pocos privilegiados". Enalteció los nexos que unen a los diversos componentes de Reino Unido, y dijo a los británicos que "juntos construiremos" un mejor país.
Hasta ahora titular de Interior, May fue proclamada líder "tory" el lunes tras una elección entre el grupo parlamentario, después de que Cameron anunciase el pasado 24 de junio su intención de dimitir por la victoria del "brexit", la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), en el referéndum sobre el bloque común.
May, de 59 años, es la decimotercera primera ministra del reinado de Isabel II desde su ascenso al trono en 1952.
Poco antes, David Cameron ofreció su última aparición pública como primer ministro esta tarde, frente al 10 de Dwoning Street.
Su discurso se centró en recapitular los logros que a su entender caracterizaron a los seis años de su gobierno. "La economía está hoy más fuerte que nunca", afirmó Cameron, y enalteció la creación de empleos en su país.
Cameron y su familia abandonaron la residencia oficial tras posar por última vez frente a la famosa puerta con el número 10 de Downing Street, y se dirigieron al Palacio de Buckingham para completar la renuncia formal.
Como establece el protocolo, el palacio dio a conocer la llamada Circular de la Corte, que da constancia de que el primer ministro "ha besado la mano del nombramiento", una formalidad que se traduce en un apretón de manos entre la reina y May, y con la que queda constancia de que el Reino Unido tiene un nuevo jefe del Gobierno.
Al abandonar hoy Downing Street, Cameron dijo que Theresa May aportará el liderazgo "fuerte" y "estable" que el país necesita.
Foto: AFP