La actividad del sector manufacturero de China se contrajo por segundo mes consecutivo en septiembre, mostró este jueves un sondeo oficial, sumándose a las señales de debilidad en la segunda mayor economía mundial que han golpeado a los mercados globales.
El Índice de Gerentes de Compra (PMI) oficial del sector manufacturero subió a 49,8 puntos en septiembre, frente a la cifra de 49,7 puntos en agosto.
Aunque fue levemente mejor que lo esperado por el mercado, aún sugiere que las condiciones del sector se están deteriorando.
Analistas consultados por Reuters estimaban que la cifra caería a 49,6 puntos, su menor nivel desde agosto del 2012, debido a que una menor demanda interna y externa dejó a muchas compañías con una capacidad ociosa y menos apetito por materias primas como mineral de hierro, cobre, petroquímicos y carbón.
Una cifra superior a 50 puntos sugiere una expansión en la actividad, mientras que una inferior a ese nivel apunta a una contracción, según una base de comparación mensual.
El Gobierno debe divulgar los datos del Producto Interno Bruto (PIB) del tercer trimestre el 19 de octubre y muchos economistas esperan que el crecimiento sea inferior a un 7 por ciento, el nivel más bajo desde la crisis financiera mundial.
Algunos expertos sobre China creen que los actuales niveles de crecimiento son mucho más débiles que lo sugerido por los datos oficiales.
Un desplome del mercado bursátil local y la sorpresiva devaluación de la moneda china en agosto han generado temores de impactos sobre la economía, que podría desacelerarse aún más que lo previsto, poniendo en riesgo una frágil recuperación global.
Desde la devaluación, funcionarios chinos han intentado reiteradamente calmar a los inversores globales y garantizarles que tienen la economía bajo control, negando que existan riesgos de un fuerte frenazo.
Fuente y foto: Reuters