El Banco Central resolvió mantener la tasa de interés de política monetaria en 3,5%.
En su reunión mensual, el Consejo destacó que los riesgos externos han aumentado, reflejándose en la caída de las bolsas y los precios de las materias primas. Esto ha provocado que las perspectivas de crecimiento para el mundo se ajusten a la baja.
A nivel interno, el instituto emisor destacó la variación mayor a la prevista del Índice de Precios al Consumidor (IPC), aunque destacó que la expectativa de inflación a dos años plazo permanece en un 3%.
"La evolución de estas variables se seguirá monitoreando con especial atención", señala el Banco Central.
También precisó que la trayectoria de la Tasa de Política Monetaria contempla ajustes pausados para mantener las cifras previstas en la inflación y siempre considerando la nueva información que vaya surgiendo.
"El Consejo reafirma su compromiso de conducir la política monetaria con flexibilidad, de manera que la inflación proyectada se ubique en 3% en el horizonte de política", indica el comunicado.