La eléctrica española Endesa declararía nulo un cuestionado aumento de capital en su filial chilena Enersis si con la operación excede más de dos tercios de la propiedad, en una medida que busca resguardar la presencia de los fondos pensiones locales en la firma.
Endesa, controlada a su vez por la atribulada italiana ENEL, solicitó en una carta -difundida el miércoles por Enersis- que la materialización del aumento de capital quede sujeta a la suscripción por parte de la hispana de al menos la totalidad de las acciones que le corresponde según su prorrata.
Con ello, se quiere evitar "superar el límite legal y estatutario de concentración del 65 por ciento", dijo Endesa.
"En el evento que la suma total de las acciones suscritas y pagadas implique que Endesa supere dicho límite, se entenderá automáticamente fallida la condición (...) devolviéndose a los suscriptores las cantidades entregadas por éstos", agregó.
Las administradoras de fondos de pensiones (AFP) en Chile están limitadas por ley de invertir en empresas cuyo controlador posee más del 65 por ciento de las acciones de la sociedad.
Endesa propuso en julio una capitalización por hasta 8.020 millones de dólares en Enersis -su principal unidad de inversión en América Latina- pero el regulador del mercado local rechazó la propuesta y obligó a la firma a modificarla tras reclamos de sus socios.
En la propuesta original de Endesa, un perito independiente había tasado en 4.862 millones de dólares los activos que planea aportar la española, pero dos nuevos estudios encargados por la compañía y uno por minoritarios arrojaron valorizaciones menores para los activos que planea aportar la hispana en la operación.
Ahora, la decisión sobre el aumento de capital queda en manos de los accionistas de Enersis, que deberán determinar si la operación es conveniente para el grupo y cuál debería ser el valor de los activos que ofrece Endesa.
Los accionistas minoritarios de Enersis han planteado el temor de que los recursos frescos que aportaran ellos en la operación -hasta 3.158 millones de dólares- terminaran en manos ENEL, la eléctrica más endeudada de Europa.
Enersis, con base en Santiago, llamaría a una junta extraordinaria para antes de fin de año.
Fuente: Reuters