Ante la demora en la discusión de la polémica legislación, el gobierno introdujo "suma urgencia" al proyecto de Ley de Pesca tras un acuerdo entre el Ejecutivo y parlamentarios.
La normativa que reemplazaría la actual -que vence en diciembre- se encuentra en la Comisión de Pesca de la Cámara de Diputados debería ser discutida y votada el próximo 12 de julio.
El proyecto establece que el Estado tiene dominio absoluto y exclusivo en los recursos existentes en los espacios marítimos en jurisdicción chilena, por lo que la explotación deberá realizarse sólo con permisos y no genera derecho alguno en el tiempo. Así, busca evitar que los recursos estén a libre disposición de la pesca industrial.
Pese a ello, el esta iniciativa cuenta con un amplio rechazo de la industria, los pescadores artesanales y organizaciones ambientalistas. Los primeros aseguran que poseen derechos históricos, mientras los dirigentes de la extracción artesanal aseguran que la licitación de cuotas favorece a las grandes empresas y los deja desprotegidos al terminar con beneficios como el seguro de vida.
Actualmente el proyecto cuenta con más de 800 indicaciones y ha generado diversas protestas, principalmente en el sur de Chile.