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IPoM proyecta caída de economía de entre 1,5% y 2,5% para este año por COVID-19

Según el Banco Central, el escenario económico que enfrenta Chile ha sufrido un empeoramiento drástico desde el IPoM anterior.

Agencia Aton

© Aton

Miércoles 1 de abril de 2020

En su Informe de Política Monetaria (IPoM) correspondiente a marzo de 2020 difundido hoy, el Banco Central estima que este año el PIB de Chile se contraerá entre 1,5% y 2,5%, mientras que en 2021 aumentará entre 3,75% y 4,75%,y que en 2022 aumentará entre 3% y 4%.

Según el BC, el escenario económico que enfrenta Chile ha sufrido un empeoramiento drástico desde el IPoM anterior, que proyectó un crecimiento de la economía nacional de entre 0,5% y 1,5% para este año.


"La propagación del COVID-19 a nivel global, las medidas que se han adoptado para contenerlo y la incertidumbre sobre sus alcances se han visto reflejadas en un desplome de las bolsas y los precios de los activos alrededor del mundo, llevando a una recesión económica global para el 2020", señaló el BC en el IPoM.

Recordó que el Consejo del BC ha tomado una serie de decisiones para mitigar los efectos de este nuevo escenario, incluido el recorte de 125 puntos base de la tasa de política monetaria anunciado ayer, llevándola a su mínimo técnico de 0,5%, junto con la aplicación de un conjunto de medidas extraordinarias orientadas a mantener un adecuado acceso al crédito y un normal funcionamiento de los mercados financieros.

A pesar de estas medidas, advirtió el BC, la crisis global afectará a Chile por diversos canales. En primer lugar, en lo que respecta a los efectos desde el exterior, provocará una caída significativa de los flujos de comercio. Para este año se proyecta que la economía mundial sufrirá una recesión, combinando caídas de actividad en el mundo desarrollado con una débil expansión en China.

Otro canal de transmisión, explicó el BC, se relaciona con el deterioro de las expectativas empresariales y de consumidores, y su efecto en el la inversión y el consumo. Previo al agravamiento de la emergencia sanitaria, ambas ya se ubicaban en niveles pesimistas y la coyuntura actual dificulta una reversión.

Además, la economía local también se verá afectada por las medidas de distanciamiento social —o medidas no farmacológicas— necesarias para la contención del contagio en Chile y asegurar su manejo por el sistema de salud. Tanto las medidas decretadas por las autoridades como las adoptadas de forma voluntaria por la población, provocan la detención, en algunos casos total, de ciertas actividades de servicios.

Asimismo, recalca el BC, el empleo y los ingresos de los trabajadores también se verán afectados. La necesidad de evitar el contagio ha llevado a la detención de actividades altamente intensivas en interacción personal, como el comercio, la educación, los restaurantes y los hoteles, entre otros.

"Aunque algunas de estas actividades pueden realizarse parcialmente de forma remota —como la educación—, en otros casos eso no es posible y la incertidumbre sobre la duración de la detención de actividades pone en riesgo el empleo e ingresos de un número importante de personas", advirtió el Banco Central.

"El desarrollo de los proyectos de inversión también está siendo afectado por la emergencia sanitaria. Algunos de los proyectos de gran tamaño que se estaban ejecutando en el país han anunciado que detendrán sus obras por algunas semanas, para evitar la propagación del virus entre sus trabajadores", agrega.

"Cuánto persistan estas detenciones dependerá de la evolución de la situación sanitaria, pero igualmente tendrá un efecto relevante sobre el desempeño de la inversión en el segundo trimestre. El escenario base supone que dichos proyectos se retomarán con normalidad a partir del tercer trimestre del presente año", explica el IPoM.