Las ventas minoristas de Japón aumentaron en el tercer trimestre debido a que menores precios y aumentos graduales de los sueldos apuntalaron el consumo, lo que sugiere que la economía nipona escapó por poco de una recesión a pesar de que fue golpeada por una desaceleración en China.
Según una base trimestral, las ventas trimestrales crecieron un 1,8 por ciento entre julio y septiembre después de un débil avance de un 0,2 por ciento entre abril y junio, una señal de que el gasto familiar está saliendo de su estancamiento.
Los datos ofrecen algo de alivio al Banco de Japón (BOJ, por sus siglas en inglés), que está bajo presión para ampliar su programa de estímulo tan pronto como el viernes, cuando también se espera que recorte sus proyecciones optimistas para los precios y la economía.
Las ventas minoristas cayeron un 0,2 por ciento en septiembre respecto al año previo, pero aumentaron un 0,7 por ciento frente al mes anterior luego de que permanecieron estables en agosto, mostraron el miércoles datos del Ministerio de Economía, Comercio e Industria.
"Lo peor para el consumo ya terminó y estamos viendo una recuperación estable debido a que los menores precios están potenciando los ingresos de las familias", dijo Takeshi Minami, economista jefe de Norinchukin Research Institute.
"Una recuperación del consumo mantendrá a la economía en rumbo a una recuperación. El BOJ probablemente no flexibilizará (su política) el viernes", agregó.
La economía de Japón se contrajo entre abril y junio y algunos analistas dicen que podría haber sufrido una nueva contracción entre julio y septiembre, debido a que la desaceleración de China ha golpeado a la producción manufacturera.
Dadas las crecientes señales de una recuperación del consumo, sin embargo, Minami de Norinchukin espera que la economía se haya expandido levemente en el tercer trimestre, escapando por poco de una recesión.
Los datos son parte de una serie de indicadores que el BOJ estudiará en su revisión de tasas del viernes, cuando enfrentará una prueba clave a sus optimistas proyecciones de que la inflación se acelerará hacia su meta de un 2 por ciento el próximo año.
Fuente y foto: Reuters