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El baile de las vírgenes

Mswati III tiene ya 12 mujeres y una fortuna multimillonaria en un país con graves problemas económicos.

24horas.cl Tvn

Martes 4 de septiembre de 2012

Una vez al año, un pequeño reino incrustado entre Sudáfrica y Mozambique acapara la atención mundial.

Se trata de Suazilandia, un territorio un poco más grande que la Región Metropolitana situado a unos 50 kilómetros de Nelspruit, localidad famosa porque fue el lugar de concentración elegido por la selección chilena durante el pasado Mundial de Fútbol de 2010.

La Residencia Real de Ludzizini es el lugar en el que se celebra la "Danza de las cañas" o "Umhlanga", en las que unas 80 mil vírgenes de todo el país rinden tributo a su monarca, Mswati III.

La tradicional ceremonia dura ocho días y atrae a miles de turistas en un país complicado por las penurias económicas.

 

Las jóvenes -denominadas "doncellas"- se visten de forma colorida y cantan y bailan juntas mientras llevan cañas a la residencia real, en un homenaje con siglos de vida a la familia real.

La princesa Simile es una de las que participa cada año en el evento. En un país que tiene la mayor prevalencia del virus VIH en el mundo, asegura - a sus 24 años- que es un orgullo participar del acto.

"Me gusta venir porque soy virgen y quiero mostrar que soy virgen", afirma.

Pese a la imagen negativa que proyecta la danza a nivel mundial, defiende con fuerza la tradición: "Hay muchas chicas ahí fuera, miles. Nos los pasamos muy bien, bailamos para nuestro rey y está muy bien".

Las doncellas pasan la noche en diferentes lugares durante la semana anterior al baile. Cortan la cañas y las llevan a Ludzizini, donde se exhiben ante el rey, la Reina Madre y otros miles de invitados.

El rey puede escoger esposa si así lo desea, la que sería la número 13 para Mswati III, cuya fortuna personal está estimada en 200 millones de dólares.

Hace año y medio, el monarca enfrentó una ola de protestas sin precedentes, cuando su gobierno designado se quedó sin dinero tras una dura recesión que afectó en 2009 a la vecina Sudáfrica. Se espera que la gran potencia regional aporte este mes el primer tramo de un rescate de 2.400 millones de rands (285 millones de dólares) para la última monarquía africana, que deberá cumplir un pliego de condiciones fiscales y técnicas.

El préstamo fue negociado en 2011, cuando el Ejecutivo suazilandés enfrentaba una dura crisis de financiamiento provocada por una caída de los ingresos procedente de una unión aduanera regional que por lo general aporta dos tercios de sus ganancias.

No obstante, el gobierno de Suazilandia se resistió un tiempo a aceptar la ayuda, por sus objeciones las pretensiones impuestas por Pretoria para que se introdujeran reformas políticas y económicas en el extravagante reino, en el que están prohibidos los partidos políticos.

Suazilandia pagará el préstamo en un plazo de cinco años que comienza en 2015.

Fuente: Reuters