La explanada del Museo de la Memoria fue el lugar elegido por la oposición para conmemorar el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973.
La candidata presidencial de Nueva Mayoría, Michelle Bachelet, oradora principal de la ceremonia, llegó pasadas las 9.30 horas al lugar para realizar primero un recorrido por las salas de exposición que recuerdan las violaciones a los Derechos Humanos ocurridos en dictadura.
Ya comenzado el acto, que tuvo la presentación del periodista Sergio Campos, se dio paso a los discursos.
"En este ejercicio activo de la memoria es necesario que al hablar de lo ocurrido, digamos lo que es justo y lo que no (...) es justo hablar de la agudización del conflicto social, la ausencia del diálogo, la intolerancia y la polarización en todos los sectores políticos", partió diciendo Bachelet.
Acto seguido, la ex Presidenta agregó que "es justo decir que si se hubiesen construido los acuerdos mínimos en torno a lo fundamental de la democracia como valor en sí misma, todo habría sido distinto (...) es justo decir sobre todo que cuando la política fracasa, fracasamos todos (…) lo que no es justo es hablar del golpe de Estado como un destino fatal e inevitable".
La ex directora de ONU Mujeres enfatizó que en ese periodo "se requería más democracia, no un golpe de Estado", apuntando sus dardos contra quienes justificaron las violaciones a Derechos Humanos.
"Los crímenes cometidos por agentes del estado, la violación de los DD.HH., no son justificables, no son inevitables, y son responsabilidad de quienes los cometieron y de quienes los justificaron", sentenció.