La abogada Julieta Bonanno fue condenada a prisión perpetua en Argentina tras enviar a matar al narco mexicano Alexander Naged Ramírez y a su hijo, el colombiano John Naged.
El caso se registró a mediados de 2018 en Belgrano luego de que la defensora contratara a un hombre para matar al que era su cliente. El sicario, que aún no ha sido identificado, ingresó al departamento en el que Naged Ramírez se encontraba junto a su hijo y les dio muerte.
El narco mexicano había sido detenido y se le imputaba como el cerebro tras un complejo sistema eléctrico que acompañaba el ocultamiento de droga en bobinas de acero en un galpón de Bahía Blanca.
No se tiene certeza de cómo Bonnano, quien ha sido definida como una abogada joven y sin antecedentes en casos importantes, lo terminó representando legalmente. Fue nombrada como su defensora junto con la de otros tres mexicanos.
Tras pericias telefónicas, afirma Clarín, se determinó que no sólo fue ella quien contrató al asesino, sino que además hubo dos intentos fallidos de homicidio días antes, cuando Bonnano se encontraba de vacaciones en República Dominicana.
El tribunal la consideró culpable como autora del delito de "homicidio doblemente agravado por haber sido cometido con alevosía y arma de fuego".
"Me hubiera gustado decir las últimas palabras antes del veredicto, que entiendo que va a ser hoy. Yo lo único que quiero aclarar es que el Estado no puede cometer delitos con el afán de obtener un resultado, una sentencia", dijo la abogada.