A falta de aviones, las pistas del Aeropuerto de Castellón en Valencia, España, son utilizadas como circuito de carretas.
Esta semana la presencia de coches circulando a alta velocidad por el aeropuerto llamó la atención de varios medios locales y vecinos. La noticia tuvo gran repercusión política, y fue denunciado por varios diputados autonómicos y televisiones.
Durante varios días se vieron vehículos de carrera, de gran cilindrada, circulando por las pistas a gran velocidad.
Ante las denuncias, la autoridad local, la Generalitat Valenciana, ligada al partido del presidente Mariano Rajoy, informó que la empresa pública gestora de la infraestructura aeroportuaria firmó un acuerdo para desarrollar prácticas automovilísticas, aunque se desconocen todavía los detalles de este acuerdo.
El polémico aeropuerto de Castellón se inauguró en marzo de 2009 y pasó a la fama por ser un “aeropuerto peatonal”. La infraestructura no ha entrado todavía en funcionamiento, carece de aviones, de permisos para operar, ni licencias. Su construcción costó 150 millones de euros, y se convirtió en un símbolo de la corrupción y la crisis que azota el país hispano.