Argentina se preparaba para una fiesta, pero el 1-0 con que Alemania cerró la final de Brasil 2014 -alzando el trofeo de campeón- dio inicio a una serie de disturbios que se extendieron por varios momentos en la zona céntrica de la capital.
De acuerdo a lo que reporta BBC Mundo, al menos 30 personas fueron detenidas en el centro de Buenos Aires que estallaron tras el fin del partido, escaramuzas que dejaron, además, varios policías heridos, aunque luego la cifra se elevó a 54 hinchas detenidos.
Los incidentes tuvieron lugar en la Avenida 9 de Julio, junto al Obelisco de Buenos Aires, así como en calles aledañas, las cuales momentos antes sirvieron de punto de encuentro para los miles de argentinos que celebraron el segundo puesto obtenido por su selección en la cita futbolística de Brasil.
Los manifestantes, muchos de ellos bajo los efectos del alcohol, apedrearon a la policía, lanzaron botellas y destrozaron la antena de una unidad móvil de televisión. De la misma forma, el comercio y locales de entretención también sufrieron los daños.
También se reportaron incidentes aislados en otras ciudades del país.
Fotos: Reuters.