El dictador sirio, Bashar al Asad, nombró el jueves a un nuevo primer ministro en reemplazo del funcionario sirio de más alto cargo en desertar del Gobierno, en un día en que el Ejército incrementó su ofensiva contra rebeldes en una zona estratégica de Alepo.
Asad nombró como primer ministro a Wael al Halki, un musulmán suní de la provincia sureña de Deraa, donde estalló la insurrección en Siria hace 17 meses, después de que Riyad Hijab desertó el lunes tras estar dos meses en el cargo.
La dramática huida de Hijab a través de la frontera con Jordania significó otro golpe a la autoridad de Asad, ya sacudida por la muerte el mes pasado de cuatro de sus más altos funcionarios de seguridad y por el avance de los rebeldes en Damasco, Alepo y vastas zonas rurales de Siria.
Pero Asad parece decidido a seguir luchando mientras sus opositores, en su mayoría suníes, buscan poner fin a medio siglo de Gobierno del partido nacionalista Baath y derrocar un sistema dominado por los miembros de la minoría alauita, cercana a la confesión rival chií.
Asad ha dispuesto una feroz contraofensiva en las dos principales ciudades de Siria y busca reafirmar el control sobre gran parte de Damasco antes de iniciar la batalla por el centro comercial del norte del país.
Los rebeldes que combaten en el distrito de Alepo de Salahedine, una puerta de acceso a la ciudad por el sur, dijeron que se habían visto obligados a retroceder el jueves por un bombardeo que redujo varios edificios a escombros.
"Ha habido alguna retirada de combatientes del Ejército de Siria Libre en Salahedine", dijo el comandante rebelde Abu Ali, quien agregó que los rebeldes se estaban reagrupando para un contraataque.
Otro combatiente dijo que al menos 30 personas habían muerto en Salahedine, donde se han producido combates durante dos días.
Mientras la batalla por Alepo causa estragos, Irán, el aliado más cercano de Asad en Oriente Medio, reunió a ministros de estados que comparten su visión sobre el conflicto en Siria para sostener conversaciones sobre cómo poner fin a la guerra.
Rusia, otro aliado de Damasco, dijo que su embajador en Teherán asistirá a la cita.
Fuente: Agencia Reuters