Anders Behring Breivik, el autor de la masacre en Oslo, ganó este miércoles una demanda contra el Estado noruego por recibir un trato "inhumano" durante el cumplimiento de su sentencia.
Según declaró ante la justicia, el país europeo habría "abusado de sus derechos humanos", específicamente en lo que respecta a tener vida privada y familiar, acusando que sufre aislamiento y que se le permite recibir pocas visitas.
Sin embargo, el gobierno de Noruega desmintió dichas acusaciones y argumento que el detenido permanecía aislado del resto de la población penal "por su propio bien".
La jueza Helen Andenaes Sekulic manifestó en su decisión que no cree que el Estado noruego haya violado los derechos de Breivik, pero que la prohibición de aplicar un tratamiento "inhumano y degradante" representa "un valor fundamental en una sociedad democrática", y que dicho principio está vigente "sin exclusión", incluso con "terroristas y asesinos".
En concreto, Breivik ocupa tres celdas: una para vivir, otra para estudiar y una tercera para realizar ejercicios físicos. Además, cuenta con un televisor, un reproductor de DVD, una videoconsola, una máquina de escribir, libros y diarios.
Cabe recordar que Anders Behring Breivik es un ultraderechista de 37 años que fue encontrado culpable por asesinar a 77 noruegos el 22 de julio de 2011, crimen por el que fue sentenciado a 21 años de cárcel.
Foto: Reuters