El presidente sirio Bashar al Asad fue investido este miércoles para un tercer septenio en una ceremonia en el palacio presidencial en Damasco.
Asad prestó juramento sobre el Corán ante los diputados reunidos en sesión extraordinaria y en presencia de más de 1.000 invitados. Dirige un país desangrado por tres años de guerra que han causado más de 170.000 muertos.
Durante su extensa intervención, el cuestionado mandatario criticó a las naciones que han apoyado el avance opositor en su país.
Los países occidentales y árabes que apoyan a la rebelión en Siria pagarán "muy caro" su respaldo, advirtió este miércoles el presidente Bashar al Asad durante la ceremonia de investidura en el palacio presidencial.
"Pronto veremos que los países árabes, regionales y occidentales que apoyaron el terrorismo también van a pagar muy caro" este apoyo, afirmó Asad, que mencionó la inestabilidad en Irak y en otros países. La oposición siria y la rebelión intentan derrocarlo desde hace tres años.
Fuente: agencia AFP
Foto: agencia Reuters