El primer ministro británico, Boris Johnson, consideró este jueves que la ofensiva de Rusia sobre Ucrania "no es solo un ataque contra Ucrania, sino contra la democracia y la libertad en Europa Oriental y en todo el mundo".
En un mensaje a la nación, Johnson prometió un "enorme paquete de sanciones" junto a los países aliados para castigar a Moscú y añadió que "diplomática, política, económica y militarmente, esta horrible y bárbara acción del (presidente ruso) Vladímir Putin debe terminar en fracaso".
Revisa el discurso del premier británico:
"Poco después de las 4 de la mañana hablé con el presidente Zelenski de Ucrania porque nuestros peores temores se han hecho realidad y todas nuestras advertencias han resultado trágicamente acertadas.
El presidente Putin de Rusia ha desatado la guerra en nuestro continente europeo. Ha atacado a un país amigo sin ninguna provocación y sin ninguna excusa. Innumerables misiles han estado lloviendo sobre una población totalmente inocente. Una vasta invasión está en camino por tierra, mar y aire. Y no se trata de algo lejano que conocemos poco.
Tenemos amigos ucranianos en este país, vecinos, compañeros de trabajo. Ucrania es un país que desde hace décadas goza de libertad y democracia y del derecho a elegir su propio destino. Nosotros, y el mundo, no podemos permitir que esa libertad se apague sin más.
No podemos y no vamos a mirar hacia otro lado. Ha sido porque nos hemos alarmado tanto en los últimos meses de la intimidación rusa que el Reino Unido se convirtió en uno de los primeros países de Europa en enviar armamento defensivo para ayudar a los ucranianos.
Otros aliados han hecho ahora lo mismo y haremos lo que podamos en los próximos días. Hoy, junto con nuestros aliados, acordaremos un paquete masivo de sanciones económicas diseñadas con el tiempo para hacer tambalear a la economía rusa y, para ello, debemos también dejar de manera colectiva de depender del petróleo y el gas rusos, que han dado a Putin durante demasiado tiempo su control sobre la política occidental.
Nuestra misión es clara: diplomáticamente, económicamente, políticamente y, finalmente, militarmente, esta horrible y bárbara aventura de Vladimir Putin debe terminar en un fracaso. Y por eso le digo al pueblo de Rusia cuyo presidente acaba de autorizar un maremoto de violencia contra el pueblo eslavo, a los padres de los soldados rusos que perderán sus vidas, no puedo creer que esto se haga en vuestro nombre o que realmente queráis el estatus de paria que le traerá al régimen de Putin.
Y le digo al pueblo ucraniano en este momento de agonía, estamos con vosotros, rezamos por vosotros y vuestras familias y estamos de vuestro lado. Y si los meses que se avecinan son sombríos y la llama de la libertad arde poco, sé que volverá a brillar porque, a pesar de todas sus bombas, tanques y misiles, no creo que el dictador ruso pueda doblegar nunca el sentimiento nacional de los ucranianos y su apasionada creencia de que su país debe ser libre.
Le digo al pueblo británico, y a todos los que han escuchado las amenazas de Putin contra los que están con Ucrania, que por supuesto haremos todo lo posible para mantener a nuestro país a salvo.
Nos acompañan en nuestra indignación amigos y aliados de todo el mundo. Trabajaremos con ellos durante el tiempo que sea necesario para garantizar que se restablece la soberanía y la independencia de Ucrania. Porque este acto de agresividad sin sentido es un ataque no sólo a Ucrania, es un ataque a la democracia y la libertad en Europa del Este y en todo el mundo.
Esta crisis tiene que ver con el derecho de un pueblo libre, soberano e independiente a elegir su propio futuro y ese es un derecho que el Reino Unido siempre defenderá".