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Brasileño quiso enterrar su auto para poder manejarlo al morir

Tal como suena. El empresario Francisco Chiquinho parecía tener la intención de hacer un ritual al más puro estilo de Egipto, pero confesó que todo se trataba de una campaña.

Fernando Jimenez

Lunes 23 de septiembre de 2013

Cuenta la leyenda que en el antiguo Egipto los faraones era enterrados en los sepulcros piramidales con sus pertenencias más destacadas para poder llegar a la otra vida.

Precisamente Francisco Chiquinho Scarpa, un empresario brasileño de 62 años, parece haber tomado la misma decisión, aunque esta vez, querría enterrarse con su propio auto.

A través de su página de Facebook, donde tiene casi 125.000 seguidores, el hombre publicó las curiosas imágenes de la construcción del hoyo para el entierro además de sus sensaciones y declaraciones.

El vehículo corresponde a un ejemplar Bentley Flying Spur negro, de último modelo, valorado en casi US$ 500.000. Francisco Chiquinho Scarpa anunció que lo enterraría en el propio jardín de su mansión, en uno de los barrios más ricos de Sao Paulo.

Sin embargo, todo se trataba de una jugada publicitaria por una buena causa: la donación de órganos.

"No he enterrado mi coche, pero todo el mundo pensó lo absurdo que sería cuando le dije que lo haría. Es absurdo que enterrar sus cuerpos, que pueden salvar muchas vidas. Nada es más valioso. Sea un donante, avise a su familia", posteó después.