Una espada que se cree que habría pertenecido a un cruzado que navegó a Tierra Santa hace casi un milenio ha sido recuperada desde el fondo del Mediterráneo gracias a la aguda vista de un buzo aficionado, dijo el lunes la Autoridad de Antigüedades de Israel.
Aunque tiene organismos marinos incrustados, la hoja, empuñadura y guarnición de un metro eran lo suficientemente características como para reconocerla después de que las corrientes submarinas aparentemente movieron las arenas que la habían ocultado.
La ubicación, una ensenada natural cerca de la ciudad portuaria de Haifa, sugiere que había servido como refugio para los navegantes, dijo Kobi Sharvit, director de la unidad de arquelogía marina de la autoridad.
"Estas condiciones han atraído a barcos mercantes durante eras, dejando atrás ricos hallazgos arqueológicos", afirmó.
La espada, que se cree que tiene unos 900 años, será puesta en exhibición después de que sea limpiada y restaurada.