A más de dos años del terremoto en Haití, las autoridades, finalmente, demolieron el palacio presidencial, que resultó afectado con graves desperfectos luego del movimiento telúrico que cobro la vida de 300 mil personas el pasado 12 de enero de 2010.
El terremoto, que tuvo una magnitud de 7,0 Ricther, dejó sin viviendas a casi dos millones de personas, de las cuales 390 mil aún habitan en campamentos de emergencia. El emblemático edificio tampoco se escapó de la tragedia y terminó en ruinas tras el fuerte movimiento.
Por eso, las autoridades demolieron el edificio que data de 1934, gracias a la ayuda de la fundación J/P Haitian Relief, fundada por el actor Sean Penn, quien ha participado activamente de la reconstrucción del golpeado país.
La demolición comenzó dos semanas después que el presidente Michel Martelly anunciara que su Gobierno reconstruiría el palacio con fondos propios.