El Servicio Federal de Seguridad (FSB), de Rusia, detuvo este lunes a uno de los presuntos mentores del atentado suicida en el metro de San Petersburgo, hace dos semanas, en el cual murieron 14 personas.
Según la cadena EFE, las autoridades rusas identificaron al agresor como Abror Azimov, oriundo de Asia Central que habría entrenado al kirguís Akbarzhon Dzhalilov, terrorista suicida que detonó la bomba entre las estaciones Sennaya Ploshchad y Tekhnologichesky Institut, en la segunda mayor ciudad de Rusia.
La detención de Azimov, quien será interrogado en la sede del Comité de Instrucción de Rusia, se dio tras el arresto de varios otros posibles involucrados venidos de Asia Central. Dicha zona es de considerable mayoría musulmana, por lo que los arrestados son sospechosos de colaborar con el Estado Islámico (EI) y otras entidades terroristas del fundamentalismo musulmán.
Medios rusos plantean que conocidos del fallecido Dzhalilov combatieron en Siria en el bando yihadista, que enfrenta tanto a las fuerzas de Siria y Rusia como las de Estados Unidos y sus aliados, aunque las autoridades del país presidido por Vladimir Putin no confirman la relación del ataque con el Estado Islámico.
El propio mandatario del mayor país de Eurasia admitió que la lucha contra el terrorismo no ha mejorado. De hecho, Rusia no sufría un atentado de ese tamaño desde diciembre de 2013.
En esa ocasión, dos suicidas mataron a 34 personas en una estación de tren y un trolebús en Volgogrado, antiguamente conocida como Stalingrado.