La Dirección General de Sanidad de Dinamarca suspendió este miércoles de forma definitiva la vacuna de AstraZeneca contra el COVID-19, paralizada desde hace un mes en el territorio, al considerar que hay una conexión probable entre esta y los casos anómalos de trombosis.
Según indicó la institución danesa, la medida se toma puesto que en el país hay suficientes vacunas pactadas con otras empresas y la situación epidémica está "relativamente controlada".
Las autoridades sanitarias señalaron, no obstante, que están "completamente de acuerdo" con la Agencia Europea del Medicamento (EMA) de que la vacuna de AstraZeneca es "segura y efectiva" contra el COVID-19 aunque recordaron que la decisión final es de cada país.
CDC and FDA reviewing data involving six reported U.S. cases of a rare type of blood clot in individuals after receiving Johnson & Johnson COVID-19 vaccine. See full statement: https://t.co/ekYT9dljtd pic.twitter.com/a7Fiixg735
— CDC (@CDCgov) April 13, 2021
Señalar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) respaldó el uso del tratamiento, pero Dinamarca optó por continuar su plan de inoculación sin AstraZeneca, manifestó el director de la Agencia Nacional de Salud, Søren Brostrøm.
Cabe recordar que la noticia desde Dinamarca se conoce un día después de que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) y la agencia de Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) recomendaron suspender en el país el uso de la vacuna de Janssen, filial de la multinacional estadounidense Johnson & Johnson, tras haber registrado seis casos de un tipo de coágulo sanguíneo "raro y grave", según ha comunicado la propia agencia norteamericana.
Según indicaron las agencias, "recomendamos una pausa en el uso de esta vacuna por precaución" debido a la existencia en estos de pacientes "de un tipo de coágulo de sangre llamado trombosis del seno venoso cerebral (CVST) en combinación con niveles bajos de plaquetas en sangre (trombocitopenia)".