Tras seis horas de negociaciones se entregaron a la policía al menos dos miembros del grupo de hombres que tomó como rehenes a una familia en la localidad boanerense de Tortuguitas, Argentina.
Los rehenes eran un matrimonio y dos menores, uno de ellos una menor de edad. Así lo confirmó otro de los hijos desde afuera de la casa, que mantuvo un contacto telefónico luego de escapar de la vivienda.
EL INICIO DEL SECUESTRO
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El suceso comenzó en horas de la tarde en las intersecciones de Seguí y Cura Brochero.
Según consignó Télam, los delincuentes interceptaron al dueño de la casa supuestamente con intenciones de apoderarse de dinero y artículos de valor, pero en ese momento un vecino que observó lo que ocurría avisó al 911.
Un móvil policial de la seccional local llegó de inmediato impidiendo que los delincuentes pudieran huir, y minutos después arribaron al lugar patrulleros de la Distrital con más efectivos, que cercaron la manzana.
Uno de los sujetos identificado como Marcelo Ameijeiras pidió "garantías" para que "todos salgan con vida". "Si no lo entienden las autoridades, esto va a ser un río de sangre", advirtió. "Si el Gobierno ordena que entren, esto va a ser una masacre", insistió.
Además, entre sus palabras Ameijeiras acusó un "complot" en el que estaría involucrado el mismísimo ministro de Justicia de Argentina.
REACCIÓN DEL MINISTRO
Ante las acusaciones, el titular de Justicia bonaerense, Ricardo Casal, calificó como un "disparate absoluto" las declaraciones del delincuente durante una toma de rehenes en Tortuguitas, donde aseguró que se fugó por un "acuerdo" entre el gobernador Daniel Scioli, el funcionario y el ministerio de Justicia nacional.
"Es un disparate absoluto que no merece respuesta. Es una cosa descabellada, lo que estoy escuchando es una locura y nunca lo escuché en mi vida", aseguró. "Un delincuente que dice eso es un loco que está alienado", afirmó el funcionario al salir del Senado provincial, donde discutió el presupuesto para el sector.
LA LIBERACIÓN DE LOS REHENES
La toma de rehenes finalizó a las 20.10 horas, tal como había prometido el vocero de los delincuentes, Marcelo Ameijeiras, al hablar cara a cara con la jueza de Garantías, la fiscal y el jefe de la Policía Bonaerense.
Tras liberar al dueño de la casa, después de haber entregado a la esposa y una niña de 9 años, los policías procedieron a la detención de los sujetos, que estuvieron mas de seis horas amenazando a esta familia y haciendo denuncias, según informó la cadena de noticias TN.