Dicen que ni la presidenta lo quiere.
Luego que las autoridades trasandinas anunciaran que la mandataria argentina, Cristina Fernández, debía tomar una licencia médica por una lesión cerebral, comenzaron las especulaciones respecto a su reemplazante, el vicepresidente, Amado Boudou, quien debería asumir la responsabilidad en medio de un complicado presente judicial.
Boudou, quien, según la constitución trasandina, debería ocupar el cargo de presidente de la república en ausencia de Fernández, enfrenta una serie de causas en tribunales que lo vinculan con cargos de malversación de fondos públicos y enriquecimiento ilícito.
El aumento innegable de su patrimonio y, su responsabilidad en el caso Ciccone, en el que estaría fuertemente vinculado con la formación de una empresa para obtener dineros públicos, forman parte de las preocupaciones que ha expresado el entorno de la mandataria que no estaría muy conforme con que fuera su reemplazo.
El hijo de Cristina, Máximo Kirchner, sería uno de los principales opositores a que Boudou tomara un rol preponderante durante la licencia de Fernández, ausencia que aún no ha sido confirmada por el oficialismo.
El primogénito de los Kirchner, líder del poderoso y controvertido grupo juvenil La Cámpora, habría iniciado -según el diario Clarín-, una campaña contra el vicepresidente, con grandes problemas de imagen pública debido a sus problemas con la justicia.
Esta mala evaluación popular preocupa al kirchnerismo de cara a las elecciones parlamentarias de finales de octubre, donde encuestas y analistas ya proyectan malos resultados.
Debido al rechazo a Boudou, se cree que Cristina Fernández podría evitar tomarse la licencia médica y delegaría el mando a su entorno cercano. Esta medida tendría como objetivo no presentar una imagen débil de cara a los próximos comicios.
Además del oficialismo, la oposición también rechaza la idea de que Boudou reemplace a la mandataria.
En el incisivo programa "Periodismo para todos" del periodista Jorge Lanata, el jefe del gobierno porteño, Mauricio Macri, dijo que "el Partido Justicialista tienen que acudir al Congreso y marcar una licencia de Cristina. Boudou no tiene autoridad moral frente a la ciudadanía. La primera incertidumbre es no saber, la segunda es cómo se van a conducir".
De acuerdo a fuentes citadas por el diario La Nación, este lunes se firmaría el reemplazo de Cristina, quien se encuentra descansando en la hacienda presidencial de Los Olivos.
El traspaso de mando, eso sí, sería sin formalismos ni anuncios oficiales para evitar empeorar la crisis del kirchnerismo, que mantiene a sus principales dirigentes preocupados por el posible fin de una era política al mando de Argentina.