Medios internacionales que siguen de cerca el delicado estado de los rehenes en Kenia, han informado que el ejército se hizo cargo de la situación.
Así confirman que se ha desplegado un gran operativo en los alrededores del centro comercial Westgate, en la capital Nairobi, donde este sábado ingresó un grupo armado vinculado a las fuerzas rebeldes de la milicia islamista de Al Shabab, célula ligada a Al Qaeda.
Los milicianos dispararon a la multitud matando a 43 personas y dejando herida a más de un centenar, para luego parapetarse en el interior tomando rehenes. El gobierno keniano estima que aún hay entre 10 a 15 radicales islámicos somalíes atrincherados en el centro comercial de Westgate.
En las últimas declaraciones de Joseph Ole Lenku, ministro del interior keniano, expresó "quiero confirmar que hemos rescatado a más de 1.000 personas". Agregó además que aún hay una treitena de rehenes en el centro comercial, razón por la que la situación se está enfrentando con la mayor responsabilidad y las autoridades tienen el control del circuito de seguridad en torno al edificio.
Aún se encuentra en marcha el operativo para rescatar a los rehenes. El perímetro ha sido ampliado para proteger la seguridad de la operación, de la que se informó hay dos soldados que resultaron heridos pero se encuentran conscientes.
El ataque de la milica de Al Shabab, se enmarca en venganza por la presencia de fuerzas keniatas en la frontera con Somalía.