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Españoles fijan los ojos en Rajoy

Se espera que el presidente del Gobierno de España hable hoy tras el Comité Ejecutivo Nacional del Partido Popular ante escándalo de corrupción al interior del partido.

Agustín Benaprés

Sábado 2 de febrero de 2013

La presión que debe tener sobre los hombros el presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, debe ser muy fuerte.

Un escándalo de corrupción sacude el interior del Partido Popular (PP) y se espera que este sábado el propio Rajoy se refiera a las acusaciones.

Todo lo destapó el diario El País y aún no hay una contestación por parte del ejecutivo español.

"El presidente del Gobierno, en su calidad de presidente del Partido Popular, dará a conocer mañana su posición sobre este asunto, en una comparecencia que podrán ver los ciudadanos", confirmó ayer la portavoz del Partido, Soraya Sáenz de Santamaría.

"En momentos de dificultad, la sociedad exige explicaciones y se deben dar y por eso el presidente va a dar sus explicaciones", añadió.

El Partido Popular negó hace dos días la existencia sobresueldos irregulares y anunció medidas legales del partido y de algunos de los dirigentes, cuyos nombres aparecen en la contabilidad manuscrita presuntamente por el ex tesorero Luis Bárcenas, imputado por corrupción, y publicada el jueves por El País.

Las revelaciones de una supuesta contabilidad B, que podría indicar una presunta financiación irregular, han perjudicado la imagen del partido y puesto en entredicho el nombre del presidente en un momento en el que lucha para lidiar con la crisis económica.

Saénz de Santamaría, sin entrar en mayores detalles, salió en defensa del Mariano Rajoy.

"Lo que he visto ha sido siempre una conducta ejemplar, nunca se ha saltado una norma, y siempre ha dado ejemplo a los que trabajamos con él", afirmó.

"No se pueden extender los comportamientos de unos a los comportamientos de todos", añadió.

El ministro de Economía español, Luis de Guindos, también presente en la conferencia de prensa aseguró a los periodistas que los mercados y la imagen internacional del país no se verían afectados por el escándalo.

"No va a haber ningún impacto importante en lo que es la confianza y la credibilidad de España", dijo De Guindos.

En el Congreso, los grupos parlamentarios solicitaron formalmente el viernes la creación de una comisión legislativa para investigar la corrupción política y sus vinculaciones con la financiación irregular e ilegal de los partidos.