En medio de la indagatoria por el presunto asesinato de un hombre tras su detención en una comisaría de San Clemente del Tuyú, Argentina, se conoció otro escándalo por violencia policial registrado en el mismo recinto hace dos años.
Según consigna TN, aquel caso ocurrió en 2019, cuando una mujer de 35 años y con problemas psiquiátricos fue detenida luego de protagonizar un accidente de tránsito.
Gisela Knorr fue detenida con un hombre luego de que ambos —que iban a bordo de una moto— chocaran contra el espejo retrovisor de un auto que se encontraba estacionado. La dueña del vehículo dio a viso a la policía.
Al llegar los uniformados, sostiene el medio, esposaron a Gisela y la trasladaron a la comisaría, cuando debieron haber avisado a sus familiares y haber dado intervención a servicios de salud debido a su bipolaridad y problemas de adicción.
En el recinto policial, la mujer gritaba y pateaba las rejas de la celda, pidiendo su medicación. En lugar de asistirla, se denunció que los funcionarios la amenazaron para que se callara y luego la golpearon.
"Mi hermana está viva de casualidad. Lo que menos quiero es tirarme en contra de alguien, pero lo que pasó con mi hermana es verdad y la policía mintió. Están las denuncias y están los nombres", expresó Noelia Knorr a C5N tras la nueva denuncia en aquella comisaría.
Tras golpearla en el rostro, cabeza, manos y piernas, sostiene la denuncia, los mismos uniformados llevaron a la mujer al hospital cuando perdió el conocimiento. Al ser interrogados por los signos de violencia, dijeron que ella se había autoinflingido las lesiones "golpeando con su cabeza y con patadas las puertas de reja del calabozo".
Luego de recibir los primeros auxilios, Gisela indicó al equipo médico que su agresor era "un hombre alto, vestido de remera blanca con un logo en el medio, camisa a cuadrillé y jean”. Más tarde, un comisario vestido exactamente como definió la mujer llegó al hospital con la intención de trasladarla a la comisaría.
Al ser identificado por la víctima y reconocido por los psicólogos, el policía fue separado de su cargo y la Comisión Provincial por la Memoria realizó un informe del caso, en una causa catalogada como "vejaciones y apremios ilegales”.