El último reporte entregado por las autoridades estadounidense sentenció que la cantidad de muertos producto de los tornados que azotaron a Texas se elevó a 43.
Dentro de las zonas más afectadas se encuentra Garland -aledaña a Dallas- en donde ocho personas fallecieron luego de que se produjeran diversos accidentes automovlísticos debido al fenómeno natural.
En la misma zona, el servicio de Meteorología local captó vientos de 321 kilómetros por hora, mientras que en Rowlett las ráfagas alcazanzaron los 265 kilómetros por hora.
Greg Abbott, gobernador de Texas, declaró zona de catástrofe en cuatro condados, en donde se registró gran cantidad de heridos y un grave daño estructural.
Cabe mencionar que el sur de EE.UU. está acostumbrado a este fenómeno, pero más en temporada primaveral, y no en pleno invierno como sucede actualmente.