El gobierno francés anunció este martes que lesbianas y homosexuales podrán casarse y adoptar hijos a partir del año 2013, en la medida más importante tomada hasta la fecha por la nueva Administración socialista en pos de la igualdad de derechos entre parejas heterosexuales y parejas del mismo sexo.
El primer ministro de Francia, Jean-Marc Ayrault, informó que su gobierno cumplirá con la promesa de campaña del presidente, François Hollande. "En el primer semestre de 2013 el derecho al matrimonio y la adopción se abrirá a todas las parejas, sin discriminación", explicó durante su discurso ante la Asamblea Nacional francesa.
La medida incluirá un plan que sensibilizará a las autoridades y otros agentes fundamentales de la sociedad sobre el "objetivo de la igualdad y la lucha con los prejuicios homófobos, que son la base de una violencia y de una exclusión que no son tolerables", señaló el ministro.
Aún así, los defensores de los derechos de los gays aseguran que la homosexualidad sigue siendo tabú en muchas áreas de la vida pública. Los medios suelen utilizar eufemismos como "soltero a largo plazo" para referirse a alguien que es gay.
"Aún hoy sigue siendo muy difícil llamar a las cosas por su nombre, como si declararse homosexual en público fuera violar un tabú", escribió un grupo de profesionales homosexuales en una columna de opinión del diario Le Monde el viernes, la víspera del Desfile del Orgullo Gay en París.
Organizaciones que defienden la formación tradicional de una familia señalaron que estaban "convencidos de que el desarrollo de los jóvenes requiere la presencia de un padre y una madre". Thierry Vidor, líder del grupo Familias de Francia, que representa a 70.000 familias y pugna por los derechos de las familias tradicionales, agregó, además que "tomaremos partido para intentar demostrar que esta medida es en último término peligrosa para la sociedad".