Cristina Cifuentes, delegada del Gobierno de Madrid, defendió "absolutamente" la actuación de la policía durante la multitudinaria protesta realizadas este martes en las inmediaciones del Congreso de los Diputados, en el llamado 25-S.
Incluso, no dudó en felicitar a las fuerzas del orden por su capacidad para controlar la "violencia excesiva de algunos manifestantes", que salieron a las calles de toda España para clamar en contra de los recortes efectuados por el Gobierno de Mariano Rajoy para combatir la dura crisis que afecta España.
La protesta se prolongó durante toda la noche, reuniendo a unas 6.000 personas, según la Delegación del Gobierno (similar a las Intendencias en Chile), si bien las cifras de la oposición y la prensa que estuvo en el lugar hablan de más de 100 mil.
Si bien los convocantes insistieron en el carácter pacífico de la protesta, la tensión con la policía fue subiendo a medida que avanzó la tarde, desencadenando una batalla campal en las calles de Madrid.
Según Cifuentes, la policía recibió "un ataque desproporcionado" con lanzamientos de "piedras, tornillos, botellas" y otros objetos. Como respuesta, aseguró que el actuar de la policía fue "correcto y proporcionado", con una intervención "muy profesional" en la que solo actuaron para "repeler agresiones".
Los argumentos de la Delegación contrastan con los testimonios de los propios manifestantes y de la prensa que estuvo en el lugar, que acusaron a la Policía Nacional de "uso excesivo de la fuerza y la represión", y que en muchas ocasiones no era justificable.
Los convocantes de la marcha de ayer decidieron continuar con las manifestaciones este miércoles a las siete de la tarde.