El gobierno de Holanda anunció que hará cumplir las leyes que ya existen en dicho país, y que prohíben la cría de razas como el pug y bulldog francés.
Según informa el sitio especializado Animal’s Health, desde el 2014 en Holanda está prohibida la cría de al menos 20 razas braquicéfalas, es decir que tienen el hocico extremadamente corto ya que esto puede afectar de manera negativa la salud de los animales por problemas respiratorios.
En cuanto a las acciones concretas, el movimiento del Gobierno holandés ya ha llevado a que un club de razas haya detenido de forma inmediata la cría de perros de raza pug. Asimismo, Milo Laurejj, de la organización que defiende las leyes que tratan sobre el bienestar animal Dier and Recht, ha señalado que “la ley ahora se está haciendo cumplir, por lo que los animales pueden realmente beneficiarse de ella”.
El país además cuenta un sistema de "semáforo", que mide los rasgos de los animales clasificándolos en rojo, naranja y verde.
El rojo incluye a los perros con una longitud de hocico más corta que un tercio de su cráneo. El naranja aplica a los canes cuya longitud de hocico sea de un tercio a la mitad del cráneo (y en estos casos la reproducción solo se permite si cumplen con los otros criterios establecidos para la reproducción).
Por su parte la "luz verde" es para los perros cuyo hocico es al menos la mitad del tamaño del cráneo y no hay limitaciones a la cría.