El presidente francés, François Hollande, expuso este martes frente a la Asamblea General de la ONU. En su discurso, dijo que la ONU debe proporcionar una protección inmediata a las zonas de Siria que actualmente están controladas por la oposición. En su primer discurso ante la Asamblea, el presidente francés solicitó el apoyo al pueblo sirio, asegurando que el presidente Bashar al Asad no tiene futuro en el escenario internacional y que Francia va a reconocer al "gobierno provisional, representativo de la nueva Siria libre, tan pronto como sea formado".
Sobre el programa nuclear de Irán, dijo que "no tiene ninguna finalidad civil", y advirtió de que Francia y sus socios europeos están dispuestos a adoptar nuevas sanciones que no buscan dañar al pueblo, sino convencer a los dirigentes para que negocien.
También denunció la "injerencia inaceptable" que está protagonizando el país persa dentro del conflicto en Siria. "Es evidente que Irán está involucrado con los recursos materiales y humanos en Siria y esto es inaceptable", declaró Hollande.
El presidente francés insistió también en que la actual situación en el Medio Oriente "no es la solución, sino un callejón sin salida", y que su país intentará ayudar a que israelíes y palestinos reanuden las negociaciones sobre la coexistencia de dos estados, ya que "cada uno sabe que esa es la única solución justa y duradera".
Además, el mandatario pidió una rápida respuesta de las Naciones Unidas para apoyar una acción militar de los países de África Occidental contra los grupos terroristas que han tomado el control en el norte de Mali. "Francia apoyará cualquier iniciativa que tomen los africanos, a partir de la legalidad internacional que les confiera un mandato claro del Consejo de Seguridad", anunció el presidente Hollande.