John Sterner, de 56 años, provocó un incendio en la iglesia anglicana St. Paul, de Ocean City (Estados Unidos), luego de entrar ardiendo en fuego.
El sujeto habría intentado pedir ayuda a una mujer que trabajaba como voluntaria, pero al momento de abrazarla, le causó serias quemaduras producto de las llamas que se expandieron por partes del recinto, aunque los daños a la infraestructura fueron menores.
El fuego también alcanzó al pastor David Dingwall, quien intentó rescatar su computador desde el segundo piso del edificio en llamas, pero falleció en el hospital poco después del incidente debido a que había aspirado gran cantidad de gas tóxico.
El hombre, quien se encontraba cubierto de una sustancia inflamable, mantenía un amplio prontuario policial por delitos como agresión, invansión de lugar habitado, destrucción maliciosa de propiedad, posesión de drogas y consumir alcohol en la vía pública.
La comunidad se encuentra consternada por el hecho, especialmente porque ocurrió un día antes del Día de Acción de Gracias.
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