La tragedia rondó en una estación de tren australiana.
Fue en la parada de Boronia, en Melbourne, donde un anciano de 88 años se desmayó en el andén y cayó a las vías justo cuando entraba un convoy.
El conductor del tren alcanzó a frenar justo antes de arrollarlo, quedando el hombre solo con heridas leves producto de la caída, según informó el Daily Mail.
Una de esas historias que no se cuenta dos veces.