Tras permanecer legal por más de tres años, la Corte Suprema de la India, en Nueva Delhi, declaró ilegales las relaciones sexuales entre homosexuales y lesbianas.
Este duro golpe para la comunidad gay del país asiático, que luchó durante años contra un polémico artículo de la Constitución que penalizaba las relaciones sexuales entre personas de un mismo sexo, fue impulsado por grupos conservadores y religiosos.
Luego que en 2009 fuera declarado legal el sexo consentido entre homosexuales, organismos cristianos, musulmanes e hindúes, recurrieron a la sentencia que despenalizaba el artículo 377 de la Constitución.
Pese a su determinación judicial que hace ilegal el sexo entre lesbianas y homosexuales, el máximo tribunal instó a renovar el polémico artículo constitucional, para, así, lograr un avance en la búsqueda de la igualdad.
Este revés legal, fue reclamado por activistas que luchan a favor de los derechos de los homosexuales.
"La sentencia de la Corte Suprema es un decepcionante retroceso para la dignidad humana y para los derechos básicos de la privacidad y la no discriminación. El Gobierno no debe esperar y cambiar el artículo 377 de la Constitución", señaló la organización Human Rights Wacht.
Hasta diez años en la cárcel pueden pasar aquellas personas que sean culpadas de mantener relaciones sexuales consentidas con alguien de su mismo sexo.