Irán ha comenzado a instalar las máquinas centrífugadoras avanzadas en su principal planta de enriquecimiento de uranio, según aseguró este jueves un informe de Naciones Unidas. Un desafío que preocupa a las potencias mundiales de cara a la reanudación de negociaciones con Teherán la semana próxima.
En un reporte confidencial, la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA), dijo que 180 centrífugas IR-2m y cubiertas vacías de las máquinas fueron instaladas en la planta situada cerca de la ciudad de Natanz.
La vocera del Departamento de Estado de Estados Unidos, Victoria Nuland, aseguró que esto significaría "una nueva escalada y una violación continua de las obligaciones de Irán conforme a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y la AIEA. Esto marcaría un paso provocador adicional”.
De ser operadas con éxito, las centrífugas podrían permitir a Irán acelerar su producción de uranio enriquecido, que Occidente teme que pueda ser usado en la fabricación de un arma nuclear. Irán asegura que sólo refina uranio para fines civiles, no militares.
Días atrás, Israel advirtió que el régimen de Mahmoud Ahmadineyad está muy cerca de construir la bomba atómica. "Los iraníes están más cerca de la línea roja", dijo a un grupo de dirigentes judíos estadounidenses que visitan Israel.