Literalmente se lo tragó la tierra.
Un joven fue engullido por un socavón abierto ubicado justo debajo de su dormitorio de su casa de Tampa, Estados Unidos.
El hecho ocurrió la noche del jueves en el estado de Florida, Estados Unidos.
Jeff Bush dormía tranquilamente en su cama, cuando de pronto fue engullido por un socavón de unos nueve metros de profundidad.
Los familiares de Jeff cuentan de pronto escucharon un fuerte ruido, seguido de los los gritos de ayuda, pero no alcanzaron a reaccionar.
El jefe de jefe del departamento de bomberos local, Ron Rogers, informó en una conferencia de prensa que "las posibilidades de que el joven siga con vida son muy escasas" ya que "el socavón es extremadamente inestable".