La ministra alemana de Educación, Annette Schavan, dimitió el sábado después de ser privada de su doctorado acusada de plagio.
El hecho se convirtió en un verdadero bochorno para esta confidente de la canciller Angela Merkel, que aspira a lograr un tercer mandato en las elecciones generales de este año.
Su decisión llega cuatro días después de que la Universidad de Düsseldorf determinara que Schavan copió "sistemática e intencionalmente" partes de su tesis doctoral, y le retirara el título más de 30 años después de concedérselo.
"No aceptaré la decisión (de la universidad) y tomaré medidas legales contra ella", dijo Schavan a la prensa.
"Cuando un ministro de (Educación) demanda a una universidad, eso supone tiranteces para mi despacho, para el ministerio, el Gobierno y los cristiano demócratas. Quiero evitar justo eso", estableció Schavan explicando su decisión.