Abdullah Kurdi, el padre del pequeño Aylan, regresó a Siria y decidió dar una entrevista al diario francés Le Journal du Dimanche.
La foto de su hijo menor a orillas del mar de Turquía sin duda ha conmocionado al mundo entero, pero nada puede hacer que Abdullah encuentre el consuelo de haber perdido a su familia.
"Si se me da ahora el mundo entero, ¿de qué me sirve? Ya no tengo ni mujer ni hijos", expresó Kurdi. Agregando que el hecho de haber sido rechazados como refugiados de forma legal en Canadá, donde vivía su hermana, fue lo que provocó que emprendieran el fatal viaje.
Kurdi aseguró que su hermana estaba dispuesta a hacerse cargo de toda su familia, por lo que ni él ni su familia significaban un gasto para el Gobierno canadiense, pero las autoridades "no aceptaron".
"A cualquier familia siria emigrada, a menos que haya miembros de la familia que trabajen, le es imposible sobrevivir", señaló Kurdi.
Tanto sus hijos, de tres y cinco años, como su esposa, murieron en la noche del martes a causa del naufragio del bote en que viajaban.