Simba, un cachorro león en Rusia, a semanas de haber nacido, fue separado de su madre y le quebraron sus patitas “para que no pudiera escapar mientras posaba en las playas rusas para tomar fotos con los turistas”.
Tras ser explotado y torturado el verano pasado, su estado de salud comenzó a deteriorarse rápidamente, estando incluso al borde de la muerte tras graves heridas que le hicieron en su columna vertebral, consignó el Daily Mail.
Luego de que empeorara, el animal fue abandonado, casi sin poder moverse, con hambre, en la región rusa de Daguestán.
Fue ahí cuando Yulia Ageeva dio con Simba y logró rescatarlo: "Prácticamente no estaba alimentado, y por alguna razón en el agua helada se vierte constantemente sobre él”, aseguró.
Y agregó: “esto fue un verdadero infierno”. El pequeño león había sufrido úlceras por la presión que tenía, además de obstrucciones intestinales y una pérdida importante de masa muscular en sus extremidades.
Hoy, Simba se ha recuperado casi por complejo, tras una larga rehabilitación donde tuvo que, prácticamente, volver a aprender a caminar.
Incluso su pelaje ha mejorado de manera considerable, donde los expertos que le han prestado ayuda aseguran que se trata de una “recuperación milagrosa para un cachorro tan cruelmente maltratado”.
