Con el objetivo de concienciar respecto al peligro que corre esta especie, más de cien integrantes de un grupo animalista británico desfilaron disfrazados como osos panda por las calles de Londres.
La manifestación, que incluyó una sesión de reiki, advirtió sobre la pronta extinción de esta especie, que sólo cuenta con cerca de 1.600 ejemplares en el mundo.
La principal causa de su exterminio se debe a la depredación de su hábitat natural y a la presión.