Parece que almorzar una hamburguesa con un plato de spaghettis le hizo muy bien a Mitt Romney, quien fue e ganador indiscutido del primer debate presidencial en el que se enfrentó con Barack Obama.
Eso es al menos lo que se deduce de lo publicado a través de la cuenta de Twitter por uno de los asesores del candidato republicano, que publicó fotografías de los momentos previos al debate realizado en a Universidad de Denver.
En las imágenes podemos determinar cuáles fueron las situaciones que le permitieron llegar seguro y confiando al primer enfrentamiento con el presidente de Estados Unidos y candidato a la reelección por los demócratas.
1- Una mañana relajada con los nietos
Ver televisión junto a los más pequeños de la familia parece haberle funcionado al ex gobernador de Masachussetts, quien según una encuesta realizada por la CNN, obtuvo un 67% de aprobación durante la transmisión del debate. Obama sólo obtuvo el 25%.
La imagen fría de empresario que ha caracterizado a Romney desde que comenzó su campaña ha dado un giro hacia un hombre de familia cariñoso y cercano.
2- Comer carbohidratos
Tal como se preparan los deportistas de alto rendimiento, Romney disfrutó de un contundente almuerzo previo a su enfrentamiento con Obama. Tenía un oponente muy fuete frente a él y no podía demostrar sus virtudes con un estómago vacío.
Por eso, su menú incluyó un plato de spaghettis con salsa boloñesa y una hamburguesa que pidió al restaurante The Cheese Factory.
3- Abrazar a su mujer
Ya sea abrazados frente a una venta o tomados de la mano camino a la Universidad de Denver, Mitt Romney se fotografió muy cariñoso con su esposa Ann los momentos previos al debate.
El papel de Ann Romney ha cobrado fuerza desde su aparición en la Convención Republicana realizada en Tampa durante la última semana de agosto. Los asesores la consideran una carta fundamental para captar el voto femenino, sobre todo, cuando la aprobación de Michelle Obama supera la de ambos candidatos.
Por su parte, Barack Obama hizo lo suyo dedicando bellas palabras a su mujer, con quien cumplía veinte años de matrimonio.
4- Celebrar con el equipo
Una vez terminado el debate y tras conocerse las primeras impresiones de los especialistas, Romney y su equipo festejaron.
Luego de tener varias semanas complejas, en las que incluso se vio forzado a dejar de lado su postura con los inmigrantes y anunció que permitiría que los jóvenes extranjeros permanezcan en el país, el candidato republicano celebra una etapa cumplida de la campaña que ahora se ha puesto cada vez más competitiva.