Nicolás Maduro se preparaba el viernes para jurar como presidente de Venezuela, mientras la autoridad electoral alista una auditoría de votos que puso paños fríos a la crisis política desatada cuando la oposición no reconoció la ajustada victoria del oficialista.
Maduro, un ex chofer de autobús de 50 años, ganó las elecciones del domingo por menos de 300.000 votos de diferencia sobre su rival opositor Henrique Capriles, quien apeló el resultado y solicitó contar voto por voto.
Pero los resultados mucho más cerrados de lo previsto provocaron choques en las calles que, según el Gobierno, dejaron ocho muertos y algunos destrozos. Incluso Maduro denunció un intento de golpe de Estado en el polarizado país petrolero.
En un espaldarazo regional, los presidentes sudamericanos se reunieron el jueves por la noche con Maduro en una cumbre extraordinaria en Lima. Aunque lo respaldaron, también le pidieron que bajara el tono de la pugna con la oposición.
Capriles, que reclamaba que se abrieran todas las urnas para contar las papeletas, aceptó el mismo jueves la alternativa de la autoridad electoral: abrir una muestra representativa que consiste en 12.000 cajas con los comprobantes de votos y además ampliar la auditoría electrónica al 100 por ciento de las actas.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) no ha precisado cuándo comenzará la auditoría, aunque adelantó que tomaría cerca de un mes.
Mientras tanto, el Gobierno terminaba los últimos detalles de los preparativos para la asunción de Maduro el viernes, una ceremonia en la que está prevista la participación de 17 jefes de Estado.
"Me quiero juramentar frente a un pueblo, para verle los ojos a los niños, a las niñas, a los hombres y mujeres humildes; con ellos yo tengo mi compromiso, aquí no habrá pacto con la burguesía", dijo Maduro el jueves.
Por la mañana del viernes aterrizaron en Caracas varios presidentes latinoamericanos, entre ellos la brasileña Dilma Rousseff, la argentina Cristina Fernández, el boliviano Evo Morales, el uruguayo Felipe Mujica y el cubano Raúl Castro. Del otro lado del océano llegó el viejo aliado del chavismo, el iraní Mahmoud Ahmadinejad.
"Tenemos una misma historia desde hace 200 años atrás (...), con seguridad ahora se profundizará un trabajo conjunto para el bien de nuestros pueblos", dijo Morales en el aeropuerto a su llegada.
RETOS ADELANTE
Después de asumir ante la Asamblea Nacional, en su primer acto como presidente encabezará un desfile militar con motivo del aniversario de la Declaración de la Independencia de Venezuela. Cazabombarderos y helicópteros han surcado los cielos caraqueños en prácticas esta semana.
Maduro tiene sobre su espalda la difícil tarea de lograr que la oposición, que alcanzó la mayor votación frente al chavismo en unas elecciones presidenciales, lo reconozca, y demostrar al movimiento formado por el fallecido Hugo Chávez que él está capacitado para liderarlo y "profundizar" el rumbo al socialismo.
"Ahora es que viene trabajo", comentó.
La presidenta argentina dijo el jueves por su cuenta de Twitter que planeaba visitar el museo militar donde descansa el sarcófago de Chávez, quien murió el 5 de marzo tras una lucha por un cáncer.
"El sábado por la mañana voy a ir al Cuartel de la Montaña, donde descansa. Quiero estar un poco más sola, sin tanta gente, ni tanto ruido", escribió la mandataria. "Mañana a Caracas, sin Hugo. Va a ser fuerte y extraño al mismo tiempo. Sus funerales fueron tan impresionantes que estaba como aturdida".
Maduro y Capriles se han mostrado los dientes desde que arrancó la rápida campaña electoral y su enfrentamiento ha arreciado tras el final de fotografía de los comicios.
Con la decisión de la autoridad electoral de auditar todos los votos, Capriles confía que demostrará su victoria, bajó un poco el tono contra su adversario y pidió a sus seguidores permanecer en casa y no caer en provocaciones.
Los opositores han mostrado su descontento con la elección de Maduro haciendo sonar -con fervor religioso- sus cacerolas puntualmente a las 20.00 locales en los últimos días.
Ahora Capriles ha pedido que durante la asunción de Maduro, sus seguidores pongan música de salsa a todo volumen en tus casas.
Fuente: Reuters