Li Lianfen de 56 años, fue encontrada muerta en un campo de sandías en el sur de China.
Junto a su cuerpo, escrementos y pisadas de elefantes acompañaron la escena del crimen.
El lugar es uno de los pocos que quedan en el país asiático donde los elefantes viven en libertad y según la policía la mujer se habría encontrado con la manada y fue atacada.
En Xishuangbanna viven todavía unos 250 ejemplares de elefantes aunque a veces se aventuran en campos cultivados si se encuentran muy hambrientos.