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Miles de egipcios toman las calles contra el presidente Mursi

Un año después de la elección del primer mandatario democrático de Egipto, critican la creciente islamización y la profunda crisis económica que sufre el país africano.

Cristián Jara

Domingo 30 de junio de 2013

Los egipcios salieron masivamente a las calles este domingo, en una muestra de fuerza que busca presionar para que el presidente islamista Mohamed Mursi a que deje el cargo.

Agitando banderas del país, miles de personas se reunieron en la emblemática plaza Tahrir de El Cairo, centro de una sublevación ocurrida en 2011 contra el predecesor de Mursi, el dictador Hosni Mubarak.

"¡El pueblo quiere la caída del régimen!", coreaban los manifestantes, esta vez no en contra de un anciano dictado, sino en rechazo del primer líder egipcio en ser elegido democráticamente hace apenas un año.

Muchos manifestantes están molestos con la agrupación Hermanos Musulmanes, a la que pertenece Mursi, critican sus intentos por monopolizar el poder y gobernar bajo la ley islámica. Otros simplemente están frustrados por la crisis económica, profundizada por un estancamiento político.

Tres oficinas de la Hermanos Musulmanes fueron incendiadas por manifestantes en ciudades del Delta del Nilo en los últimos actos de violencia, tras más de una semana de incidentes que han dejado un saldo de cientos de heridos y varios muertos, entres ellos un estudiante estadounidense.

Más de 10.000 partidarios de Mursi también se congregaron en la capital, específicamente cerca de una mezquita que no está alejada del palacio presidencial.

Entrevistado por un periódico británico, Mursi reiteró su determinación a superar lo que ve como un ataque antidemocrático a su Gobierno. Sin embargo, también se ofreció a revisar la nueva constitución, de inspiración islamista.

Mursi hizo una ofrecimiento similar la semana pasada, pero la oposición ha calificado estas protestas como demasiado tardías y espera que Mursi renuncie ante la presión de los manifestantes callejeros.

Si bien muchos egipcios están molestos con Mursi por su manejo económico, muchos otros temen que el caos podría complicar aún más las cosas.

Mursi y los Hermanos Musulmanes podrían estar esperando que las protestas se esfumen como ha ocurrido con estallidos anteriores, pero si esto no sucede algún tipo de compromiso, posiblemente arbitrado por el ejército, podría estar en la agenda.