El pensador, escritor y diplomático francoalemán Stéphane Hessel falleció la madrugada de este miércoles a los 95 años en Francia.
Hessel es el autor del popular manifiesto "¡Indignaos!". En sólo 32 paginas llamó a la población a la resistencia ante la crisis económica que afecta al Viejo Continente. Sin mucha publicidad y una pequeña cantidad de ejemplares, la obra se convirtió pronto en todo un éxito.
Por esto, el escritor es considerado como el padre del movimiento de los indignados en Europa y Estados Unidos, los mismos que ocuparon plazas y han llenado las calles en los últimos años.
Su obra fue traducida a una treintena de idiomas y se han vendido unos cuatro millones de ejemplares en un centenar de países, convirtiendo a su autor en un referente de la izquierda por sus críticas a las políticas llevadas a cabo en occidente.
Hessel nació en Alemania el 1917, durante la Primera Guerra Mundial, y emigró a Francia con su familia en 1924.
Durante la Segunda Guerra Mundial formó parte de la Resistencia y, por sus orígenes judíos, fue buscado y deportado a los campamentos de concentración de Buchenwald y Dora-Mittelbau.
Tras sobrevivir a las torturas, comenzó una carrera como diplomáticos y contribuyó a la redacción de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en 1948.