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Muere Albano Harguindeguy

A sus 85 años, estaba a punto de recibir su primera condena por su papel en la dictadura.

24horas.cl Tvn

Miércoles 31 de octubre de 2012

Amasó un gran poder durante la dictadura argentina y es considerado como uno de los "arquitectos" y "cerebros" de la represión durante los "años de plomo" que vivió el país transandino. Sin embargo, Albano Eduardo Harguindeguy murió a los 85 años con su expediente limpio de condenas judiciales.

En opinión del diario Clarín, "si la Justicia y la política fueron piadosas con él, difícilmente lo sea la historia". Y es que el general falleció este lunes en su casa de las afueras de Buenos Aires esperando en silla de ruedas la que, con toda seguridad, iba a ser su primera condena por ordenar torturas y asesinatos durante el régimen militar establecido entre 1976 y 1983.

Harguindeguy fue jefe de la Policía Federal en los últimos tiempos del gobierno de Isabel Perón, contra quien conspiró para su derrocamiento.

Una vez establecido el gobierno militar, gozó de un gran poder al frente del Ministerio del Interior, integrando el llamado "núcleo permanente" con el presidente, Jorge Rafael Videla, y el ministrode Economía, José Martínez de Hoz.

En varias entrevistas y libros aseguró que no se arrepentía de nada de lo que hizo, porque "el enemigo estaba en todas partes", pero reconoció que su gran error fue haber dejado "desaparecidos", lo que consideró "un error que lamentar".

Harguindeguy se libró del juicio impulsado en 1985 por Raúl Alfonsín contra las juntas militares, pero fue imputado más tarde por crímenes de la dictadura. Beneficiado por los indultos de Carlos Menem, fue en 2004 cuando -gracias al impulso de Néstor Kirchner, quien derogó las leyes del perdón-, sus delitos se declararon imprescriptibles y debió responder por su papel en el Plan Cóndor establecido en el Cono Sur para eliminar a los opositores.

Sobre él pesaba una orden de arresto domiciliario, y sólo dejó su vivienda para acudir al juicio que se seguía en su contra y para tratarse en el hospital. Ahora, sólo "faltaba el veredicto (...). Lo que no pudo la Justicia, lo hará la historia", según sentencia Clarín.